Una boda llena de mezclas culturales y de tradiciones con la unión de dos almas y dos corazones convertidos en uno solo y en una sola celebración. Nosotros pudimos plasmar ambas historias en una única y especial con total plenitud en el diseño y decoración tanto en el altar y la trona. Fusionamos ambas historias en un solo altar el cual representaban los pilares de los valores e historia y orígenes de los novios y completamos todo con la trona, que fue un diseño exclusivo donde plasmaba ambas ciudades de los novios en un solo lugar con nuestro espectacular suelo de cristal que alude la magia y el despegue del amor eterno.